jueves, 2 de marzo de 2023

Supervivencia.

La mochila realmente es el mejor amigo del hombre, saben todas las cosas que pueden caber en una mochila lo suficientemente grande? 

-Una biblia católica, comentada, con todo el magisterio adendado,  y hasta apócrifos incluidos, más los arcanos patrísticos añadidos.
-Un hábito, con Rosario, y sacramentario.
-Una manta para acorazamiento, de preferencia con imágenes de santos.
-Una tapa, una frazada, y una manta impermeable.
-Un cartón, para no tocar el piso helado.
-Una carpa o toldo.
-Un hacha, de mango intercambiable, cabeza afilable.
-Un cuchillo, para cortar madera.
-Una piedra de afilar.
-Un cinturón de cuero.
-Unas cuerdas.
-Un ferrocerio para el fuego.
-Una cantimplora.
-Una tetera y ollas.
-Un bol, cubiertos, toallita para los cubiertos, y un vaso.

Lleva contigo mismo algunas habilidades como la habilidad para hacer nudos, y creo que esto es el mínimo de bloques constructores para una vida cómoda. 

Incluso podrías hacer más espacio, el bol lo podrías llevar en la cabeza a modo de casco, hazle un par de hoyos en los bordes y átalo con un buen hilo y presto. Cubres los cubiertos con la toallita, los metes en el vaso y el vaso en la olla, otra optimización. El Rosario lo puedes traer enrollado en una mano o en el cuello. El cinturón lo puedes traer puesto en algún lado. Las cuerdas podrían ser de doble uso, ya que puedes usar la carpa o toldo como mochila en sí y las cuerdas para atarlo todo. La cantimplora puede ir colgando del cinturón. Entonces se ve, que tienes todavía más espacio para más cosas. Por que el cinturón lo puedes usar con una toalla grande para atar cosas como el ferrocerio y el cuchillo. Podrías también plegar la caja para guardar el toldo que tenga todo y lo atas con las cuerdas.

Es que, qué más necesitas? Con algo de carbón, una rama esterilizada y un poco de agua te haces hasta dentífrico. Vivir como mendicante de forma preparada es preferible para los hombres que quieran abandonar el mundo y vivir de la caridad divina.

Aunque igual y estoy idealizando una imagen irreal de los hechos, al fin y al cabo no soy yo experto en supervivencia. Como se puede ver por el hecho que ni pensé en la comida, pero realmente, Dios nos proveerá si quiere, y si quiere que muramos de hambre, pues morimos de hambre.