Como se puede ver en mi previa entrada, estoy enojado con los tipos de gente que crean cosas, los "creadores", no es blasfemo acaso llamar a un hombre ""creador""? Sólo hay un creador, un sólo artífice, un sólo y único ser que está bien que Él cree, y nadie más al crear puede hacer algo bien. Yo escribiendo ésto no espero ni tampoco quiero que alguien lo lea y le tenga cariño, eso está mal.
Está mal querer ser un """creador""", porque no estás haciendo nada bueno, todo lo que viene de la mano del hombre está mal de forma innata. Y cuando digo """"creador"""" me refiero por supuesto a la gente que escribe ficciones, los detesto mucho.
Yo llegué a la conclusión de que hacer historias está mal, es incorrecto, superfluo, enseña ridiculeces, es una mentira que la gente toda sabe que es falsa, pero piensan que ocurre y pretenden que sí pasa en algún lugar.
Pero al ser una mentira humana tiene como sello creativo al padre de la mentira, ya saben quién. Y entonces quién será el loco que acepte historias ficticias? Gente que no quiere ver que las únicas historias de valor son las de la biblia, ni siquiera historias no-ficticias valen la pena, la historia profana no tiene valor real, a no ser que sea para expandir el reino de Dios.
Y dirán, "no podemos usar acaso ficciones para el mismo fin?" NO. La Verdad de la religión católica nunca se valió de mentiras para expandirse, cualquiera que diga lo opuesto es un hereje, no valen la pena ser convencidos de la Verdad.
Yo antes también pensaba que ser un """""creador""""" sería "divertido", no vale la pena, es basura inservible. Si me dejan, quemaré todos los libros del mundo que no sean aprobados por la iglesia, quemaría toda cosa que no sea aprobada por la Iglesia y punto.
Pero Dios será quien haga eso, y lo hará de forma mucho mejor y eficiente, lo quemará todo en el gehenna. Gracias a Dios.
Si me equivocase en algo, que baje Dios mismo en persona a decírmelo, sólo a Él escucharé. Cualquier otra no aceptaré, porque puede perfectamente ser el adversario intentando aparecer como ángel de luz, que Dios nos salve en el día de su ira.
