martes, 7 de febrero de 2023

Gloria a Dios en la tierra.

Estuve pensando en qué decir. Cuando esté allá, en Argentina. Yo sólo quiero expandir el nombre de María y Jesús por todo el globo. Que en las noticias hablen del repentino auge de la fe tradicional católica. De la victoria sobre el mundo y sus distracciones. Que sea el tema del momento, que puedas parar a alguien en la calle y esté lleno de opiniones al respecto y esté por estallar de querer hablar de nos. Que invada nuestra misión todo ámbito de la vida cotidiana de modo que todo el mundo sea dividido entre los que están con nosotros y el resto.

Recuerdo en 2019 había salido una película que fue muy popular, y así era, recuerdo intentar arruinar el final a alguien que hablaba de ella en el trasporte público, pero ya se lo sabía. Porque el escándalo es más propagandístico que el buen comportamiento. Por eso creo que es correcto ser ariscos y bravos al expandir la fe, pues ya es el final, de verdad ¿no con más fuerza que en cualquier otro momento de la historia tenemos ahora que empujar la fe a todos? Pues el final está pronto. Bueno, será lo que Dios quiera.

A mi parecer los demás sedevacantistas están contentos con el nivel de difusión que tienen. Pero yo no, yo no estaré contento hasta que cada ser humano en la faz del planeta entero conozca el nombre del que lo creó. No me voy a sentar a descansar, no hasta que no esté terminado mi trabajo.

Quiero construir el Arca que salvará a los jóvenes del modernismo. Si Dios me deja, claro.