miércoles, 26 de julio de 2023

Diario 42

No puedo hacer nada bien 😔.

Las palabras de san Alfonso que cité en la entrada titulada "Beowulf" me son ultra difíciles de tragar, especialmente si las comparo con las palabras de Su Santidad León XIII, en su libro "La práctica de la humildad", me parecía imposible pensar que los dos se estuviesen refiriéndose a lo mismo. 

Porque las indicaciones de san Alfonso te urgen pensar en Dios como un amigo, mientras que las de León XIII te obligan a tener una relación tan unilateral con Dios que solo me hacen pensar en Dios como un rey. 

Yo dije en la entrada de Diario número 18 que "para mí, Dios es más mi Rey que mi Padre" lo expando, para mí es más Rey que amigo, a pesar de lo que dije en la entrada titulada "Amigos", (y de seguro en otras entradas), de que Jesús es mi amigo, encuentro eso muy difícil de creer.

La verdad esto es una situación difícil, producto de no tener yo un director espiritual que me guíe en estos momentos. Pero realmente, creo que lo que me estaba doliendo era mi propia soberbia. Aunque mis intereses fueran simples, seguía hinchado de soberbia, y me sentí arrepentido.
 
Como dice san Bernardo:
¡Oh hombre soberbio, que buscas alojamiento en el palacio real, y Cristo tu Rey no 
tuvo lugar y fue puesto en el pesebre. Tú buscas compañía para estar entre los hombres honorables, y Cristo fue puesto en medio del buey y del asno. Tú quieres sirvientes, y Cristo no tuvo ninguno. Tú te vistes con telas preciosas y purpuradas, y Cristo fue envuelto en muy viles pañales. Tú abundas en riquezas, y Cristo estuvo lleno de pobreza. Tú ríes, y Cristo llora.

Tenía tantas pretensiones megalómanas y grandilocuentes, como lo es el deseo de catalogar todos los textos católicos. Porque han sido olvidados de la cultura, ya que no hay cultura real en occidente, solo una cultura global homogeneizada, un globohomo, en donde no hay nada de santo, solo ficciones.

Pero como luego dije en la entrada de Diario 40, no creo necesario ya eso; miremos a san Enoc profeta, qué sabemos de él aparte de que está en el Cielo Empíreo? Incluso si seguimos el testimonio de los santos que hablan de él, no mucho. Me da confianza, el Espíritu de Dios, el Paráclito, que literalmente significa "el que consuela", será Él el que reservará las cosas para cuando se desenvuelva, cuando se quite el sello del evangelio eterno. No hay porque temer en la perdida de la sabiduría, ya que es algo de origen divino, a diferencia de la técnica mal-llamada ciencia del mundo moderno.

En no tener un grupo que te obligue a mantenerte santo, que te demande ser un buen cristiano a cada hora. Sin esa comunidad cristiana en donde repose el Paráclito (lit. El que Consuela) difícilmente podrá llegar uno a la santidad. Por eso repito la resolución que dije en la entrada "Nimbus Nigra", quiero ser el líder ideal de ésta cofradía; cuando estaba yendo el gimnasio la idea de alcanzar a ser un modelo a seguir era mi motivación única y seguía yendo.

Y bien pues, ahora lo único que me motiva es esto.